A este paso, el denominado ‘caso La Mareta’, va camino de convertirse en un tedioso serial más enredado y judicial que el eterno ‘caso Faycán’. Un conglomerado de actores políticos, empresariales y periodísticos, han creado una tela de araña tan tupida de ‘dimes y diretes’, que resulta imposible descifrar. Y lo peor, tampoco le importa lo más mínimo al común de los ciudadanos de Telde, que lo que realmente quieren es resolver sus problemas del día a día, cosa que lamentablemente no sucede.
Lo poco que subyace en este jeroglífico asunto, es que da la impresión que se han puesto de acuerdo todos (o casi), para pintar como malo muy malo, culpable de todos los males de la ciudad, a Juan Francisco Artiles y su partido Más por Telde. Parece existir un interés común en defenestrar al único político capaz de arrinconar a Nueva Canarias de verdad, mantenerse firmemente en la oposición si vacilar y no doblegarse a los terribles poderes fácticos de Telde. Nada fácil lo que ha conseguido, pero eso tiene un precio: Aumento porcentual de votos y enemigos.
Con la última decisión conocida del Consejo Consultivo de Canarias avalando el procedimiento iniciado por el Ayuntamiento de Telde para la resolución del contrato con Parque Empresarial y de Ocio La Mareta, parece que todos los problemas del gobierno de Telde se acabaron. Fiesta de titulares y celebraciones, como si Carmen Hernández hubiese recuperado la mayoría Plenaria, aprobado por fin un Presupuesto, reabierto las Escuelas Infantiles y solucionado el drama de Servicios Sociales de un tirón. Nada más lejos de la realidad.
ONDA GUANCHE quiere conocer la opinión de la ciudadanía sobre “¿Todos contra Más por Telde?” Para tal fin, en la sección de “Encuestas” que habilitamos en la columna derecha de la web, abrimos los próximos siete días, un cuestionario sobre este asunto, al objeto de hacernos una idea aproximada de cómo valora la calle esta situación.
2 comentarios en «¿Todos contra Más por Telde?»
Aqui, solo existe una cosa y es ¿quien creo el consejo consultivo?, ¿para que lo creo? y ¿quienes han pasado por su dirección?, ¿de donde provienen?.
Así es como se empieza a investigar una cosa, que por mucho que queramos, los politicos cuando no pueden hacerte doblar la rodilla, se escudan en folios y folios, latinajos y demás asusta viejas, para amedrentar.
Empecemos por ahí, o como dicen los gitanos «JUICIOS TENGAS Y LOS PIERDAS, PAYO»
AHORA, POR IGNORANCIA E INCULTURA, LA EXCUSA ES ESCONDERSE DETRÁS DEL CONSEJO CONSULTIVO, que, habría de mirarse con detenimiento, que coño es ese viejo invento, que pagamos todos.
Hay muchas, ¿infinitas?, formas de meterse en política y no participando de la misma manera. Lo primero, que hay que entender, es que después de cualquier elección, «TODOS HAN GANADO», lo de «ganado», va con segundas, pero eso no lo pillan esas mentes privilegiadas, eso es exclusivo de, cara cortada, culo bandeja y tripa rodillera.
Nunca he visto y mucho menos ustedes, a un político, asumir la derrota, siempre encuentra la palabra justa, donde tergiversar el resultado. No pueden asumir la pérdida del echadero. Y buscaran hasta la saciedad, el intercambio de chaquetas, para continuar medrando, dentro del gobierno de turno.
Hay que ponerse, en el lugar del futurible político, primero vayamos a analizarlo (lo escribo en neutro, debido a, que siempre se ha escrito así, antes que, a otro mindundi se le encendiera la funda escrotal y nos saliera con eso, del “los-las”), inculto, en busca del echadero que le de comer por la cara, de los que no tienen otro medio de vida, más que ser político y los ves temblando. Eso sí, a los socialistas amigos siempre se les busca un echadero
Todos, los que han participado para ser elegidos, saben que sus proyectos saldrán adelante, en colaboración con los otros. A esto se les llama pactos y todos querrán y quieren ser jefes de la manada. En política se debe estar preparado para el compromiso y para dar por bueno cosas que particularmente no lo harías en tu esfera particular.
Estas últimas elecciones, hace ya dos años, se ha votado a mucho imberbe, que no le han dejado, ni posibilitado, la participación en los grandes partidos, blindados sólo para los que ellos deciden.
Esta nueva generación de políticos, se han montado en el tren que pasaba. Con independencia del vagón. Eso da igual. Muy preparados, ellos, en sus falsos currículos y con escaso conocimiento del medio, que ya lo adquirirán, a través de sus nuevos asesores.
Si analizas, con el paso tiempo, los cambios y movimientos de defensores de unas siglas, que se pasan a otra (tienen armarios cargados de chaquetas). No te sorprenderías, de los que empezaron en la derecha y acabaron en la izquierda, o viceversa. Incluso en el centro. Por eso, muchos de los que ahora convencen de blanco, los veremos intentando convencernos, de negro, naranja, morado, amarillo, o lo que le convenga a él, en ese momento; lo importante es el echadero.
La política no es ser juez. En la política no se imparte justicia. Todo lo contrario, en la política se crean las leyes para favorecer en exclusiva las decisiones de unos políticos en contra del pueblo, a la vez que se les busca echadero a los amigos investidos de puñetas, para que, con la Ley en la mano, hagan cumplir los dictados, de unos políticos.